Lecturas de Hoy

Memoria Opcional de San Clemente I, Papa y mártir

Lectionary: 685


                                 Común de mártires o de pastores [por un Papa]

Primera lectura

1 Ped 5, 1-4
Hermanos: Me dirijo ahora a los pastores de las comunidades de ustedes, yo, que también soy pastor como ellos y además he sido testigo de los sufrimientos de Cristo y participante de la gloria que se va a manifestar.

Apacienten el rebaño que Dios les ha confiado y cuiden de él no como obligados por la fuerza, sino de buena gana, como Dios quiere; no por ambición de dinero, sino con entrega generosa; no como si ustedes fueran los dueños de las comunidades que se les han confiado, sino dando buen ejemplo. Y cuando aparezca el Pastor supremo, recibirán el premio inmortal de la gloria.

Salmo Responsorial

Del Salmo 88

R. Proclamaré sin cesar la misericordia del Señor.
Cantaré eternamente
del Señor las bondades
y anunciará mi boca tu lealtad
por todas las edades.
Pues el Señor ha dicho:
“Mi amor es un amor eterno
y mi fidelidad,
más firme que los cielos”.
R. Proclamaré sin cesar la misericordia del Señor.
Una alianza pacté con mi elegido,
a mi siervo David, yo le he jurado:
“Perpetuaré tu descendencia
y afirmaré para siempre tu reinado”.
R. Proclamaré sin cesar la misericordia del Señor.
Hallé a David, mi siervo,
y lo he ungido con óleo sagrado
a fin de que mi mano lo sostenga
y lo revista de valor, mi brazo.
R. Proclamaré sin cesar la misericordia del Señor.
Su poder en mi nombre crecerá,
Mi amor y mi lealtad serán su escolta.
El me podrá decir: “Tú eres mi Padre,
mi Dios, mi roca salvadora”.
R. Proclamaré sin cesar la misericordia del Señor.

Aclamación antes del Evangelio

Mc 1, 17
R. Aleluya, aleluya.
Síganme, dice el Señor,
y haré de ustedes pescadores de hombres.
R. Aleluya.

Evangelio

Mt 16, 13-19
En aquel tiempo, cuando llegó Jesús a la región de Cesarea de Filipo, hizo esta pregunta a sus discípulos: “¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre?” Ellos le respondieron: “Unos dicen que eres Juan el Bautista; otros, que Elías; otros, que Jeremías o alguno de los profetas”.

Luego les preguntó: “Y ustedes ¿quién dicen que soy yo?” Simón Pedro tomó la palabra y le dijo: “Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo”.

Jesús le dijo entonces: “¡Dichoso tú, Simón, hijo de Juan, porque esto no te lo ha revelado ningún hombre, sino mi Padre que está en los cielos! Y yo te digo a ti que tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia. Los poderes del infierno no prevalecerán sobre ella. Yo te daré las llaves del Reino de los cielos; todo lo que ates en la tierra, quedará atado en el cielo y todo lo que desates en la tierra, quedará desatado en el cielo”.

Los textos de la Sagrada Escritura utilizados en esta obra han sido tomados de los Leccionarios I, II y III, propiedad de la Comisión Episcopal de Pastoral Litúrgica de la Conferencia Episcopal Mexicana, copyright © 1987, quinta edición de septiembre de 2004. Utilizados con permiso. Todos los derechos reservados. Debido a cuestiones de permisos de impresión, los Salmos Responsoriales que se incluyen aquí son los del Leccionario que se utiliza en México. Su parroquia podría usar un texto diferente.